sábado, 19 de julio de 2008

EL DISPENSADOR.

Sea yo pan del hambriento.

Sea yo agua para el sediento.

Sea yo la paz del atribulado.

Sea yo bálsamo de corazones.

Sea.

Probar al hombre

Se agita la criba y queda el desecho,
así el desperdicio del hombre cuando es examinado;
el horno prueba la vasija del alfarero,
el hombre se prueba en su razonar;
el fruto muestra el cultivo de un árbol;
la palabra, la mentalidad del hombre;
no alabes a nadie antes de que razone,
porque esa es la prueba del hombre.

Eclesiástico 27,4-7